La ballena azul, Purpurina, salvó al gatito Michifuz de las terribles ratas del barco, aquella vez que lo tiraron por la borda. Purpurina pensó que el gatito mojado se parecía a una ballena. Y ahora ella no sabe si es una gata o si Michifuz es una ballena. Para averiguar quién es quién realmente y encontrar a Michifuz, Purpurina viaja a la ciudad.
En la costa, conoce a Dai-Dai, una gaviota que cree estar emparentada con la China. Dai-Dai ayuda a Purpurina a fabricar una moto, y en ella van al puerto a buscar a Michifuz.
No se trata de un simple paseo por la ciudad, sino de un viaje fascinante lleno de nuevos descubrimientos. La ballena está pisando tierra firme por primera vez. Porque a veces incluso una gran ballena puede sentirse muy sola en un vasto océano de muchos peces.